lunes, 31 de agosto de 2015

UN AÑO DE COLABORACIÓN


Ya ha pasado un año, parece que fue ayer cuando Óscar me ofreció la oportunidad de colaborar en el blog de la Escuela de Padres con Talento y tras más de 125 entradas y superando las 13500 visitas, la ilusión se encuentra intacta.

Las ganas de ayudar en la educación de nuestros hijos, de facilitar este trabajo que a veces se hace cuesta arriba, de aclarar ideas, en definitiva, de aportar mi granito de arena para que los niños sean más felices y los padres disfruten de esta maravillosa etapa que es la crianza.

Para que cuando echen la vista atrás, la recuerden con alegría y cuando posen sus ojos en sus hijos ya adultos, se sientan satisfechos de su trabajo, de sus esfuerzos, de sus desvelos...

Espero seguir mucho tiempo más. Es un verdadero placer compartir este espacio de reflexiones con vosotros y mi objetivo en este nuevo curso es que seáis más participativos para que este blog sea una verdadera ayuda y una herramienta que nos de seguridad en momentos de confusión.

Mil gracias Óscar.

miércoles, 19 de agosto de 2015

LA INTENCIONALIDAD EN LA EDUCACIÓN ES FUNDAMENTAL.

Estar en la piscina junto a un grupo de madres muchas veces no sólo sirve para descansar y relajarte sino que también, a los que nos gusta escuchar más que hablar, nos sirve para aprender cosas nuevas, como la visión que tienen algunas personas sobre la educación y la forma de llevar a los niños, entre otros asuntos.
A veces, las personas están muy acertadas y tienen ideas que realmente merecen la pena, suelen ser personas que tienen las habilidades parentales muy desarrolladas, que están abiertos a ideas nuevas y no les cuesta darse cuenta que en un momento determinado pueden hacer las cosas aún mejor, son los que yo llamo " Padres Permeables".
También me encuentro en el otro extremo a personas que no asumen que siempre existen ideas mejores que las que podemos estar usando y que tienen "Teorías" que sólo debemos esperar unos años para ver que los resultados no son los más adecuados. Son los "Padres Impermeables".
Tanto unos como otros tenemos algo en común, unos hijos maravillosos que están a nuestro cargo y que son la mejor empresa que tenemos en nuestra vida. 
Al igual que en nuestros trabajos, debemos prepararnos, informarnos, leer, interesarnos... Nos preparamos años y años para realizar nuestras labores profesionales pero para nuestra función de padres nos puede a veces la soberbia o la pereza y no nos damos cuenta que no  sólo debemos alimentarlos y ponerles una habitación de ensueño con los últimos avances en tecnología, sino que nos olvidamos que la educación integral de nuestros hijos es un proceso intencional en el que, dependiendo de la etapa evolutiva, debemos ir trabajando unas áreas u otras.
Es así de simple, funcionar por objetivos, adecuados a cada edad. Acompañar a nuestros hijos en cada nueva adquisición, dedicándoles tiempo y paciencia. No debemos esperar a que los niños aprendan por "generación espontánea" y en el proceso cruzar los dedos diciendo "Ojalá no me salga así" (que lo he escuchado más de una vez). 
Como cada cosa que queremos conseguir en la vida nos ocupamos, nos preparamos y fijamos objetivos, así debemos plantearnos la educación para que la probabilidad de éxito aumente de forma considerable.

viernes, 14 de agosto de 2015

EL REPARTO DEL TIEMPO EN VACACIONES

Muchas veces escucho en distintos foros la necesidad que tenemos los padres de descansar y de no tener horarios y es cierto, las vacaciones están para desconectar, pero no puedo dejar de matizar esta idea.
Para ser exactos en la expresión, creo que la idea general no es no tener horarios sino ser más laxos en su cumplimiento. 
Bajo mi punto de vista, uno de los grandes cambios que necesitamos en la educación es organizar mejor los periodos vacacionales. Entiendo que los niños en los diferentes trimestres terminan extasiados, no es difícil encontrar maestros que te dicen que los niños atienden menos, están más revoltosos y las calificaciones bajan. 
En el otro extremo nos encontramos vacaciones estivales de tres meses, desde mediados de Junio a mediados de Septiembre. ¿Os habéis parado a pensar lo lento que pasa el tiempo en la infancia?. Tres meses es una eternidad para los niños, llega un momento en que viven al revés, se comen las mañanas durmiendo o bien se levantan muy temprano y se comen la tarde durmiendo, se duermen muy tarde, empiezan a comportarse de forma caprichosa, se aburren...los padres agotados de no horarios, de niños sin objetivos...Realmente se desconecta así?
Pienso que la mejor manera de afrontar las vacaciones en primer lugar sería que estuvieran mejor repartidas a lo largo del curso (aquí nos chocamos con la conciliación, ya lo sé), y en segundo lugar, que dentro de la relajación horaria, los niños siguieran teniendo rutinas básicas y pequeños "deberes" adecuados a su edad, pero no sólo escolares, sino también tareas de casa (Os remito al post 
http://blogeptalento.blogspot.com.es/2015/07/ahora-que-tenemos-tiempo.html  
Ahora que tenemos tiempo).
La "Cuesta de Septiembre" es dura, emocional y físicamente, no la hagamos más complicada por no saber o no querer gestionar los periodos vacacionales con el gran condicionante que tenemos, nuestros maravillosos hijos.

lunes, 10 de agosto de 2015

DATE PERMISO


Hoy he ido a ver con mis hijos la película "Inside Out", todo el mundo me la había recomendado y ciertamente ha sido un gran descubrimiento.
En realidad la película es buenísima, no sólo por la temática sino por cómo explica de manera básica el funcionamiento del cerebro, de la memoria a largo plazo, de la personalidad que vas desarrollando a partir de las experiencias vividas...es todo un alarde de imaginación y buen hacer.
Por suerte, hablar de las emociones está de moda, hay que ponerle nombre a lo que sentimos y debemos aceptarlas porque son parte de nuestra esencia.
El trabajo de los psicólogos muchas veces se remite a esto..."¿y qué sentiste en ese momento?", es una de las frases que más usamos para hacer consciente al paciente  de la emoción que lo está dominando en determinados momentos.
Me ha entusiasmado Tristeza, todos las personas en general y los padres en particular intentan que no forme parte de nuestras vidas, cuando en realidad es tan necesaria como cualquier otra (de la familia de la tristeza es la Frustración, no lo olvidéis).
En Diciembre de 2012, ya escribí un post en mi otro blog sobre este sentimiento y os lo transcribo aquí. Espero que os guste.
"Un contratiempo, Dos contratiempos, Tres contratiempos...cuántos deben suceder para permitirme sentir mal?
La teoría dice que ninguno, que a cada revés que de da la vida hay que levantarse, que todo se arregla menos la muerte y ésta lo arregla todo, como hubiera dicho mi padre. Pero entiendo que en la práctica es todo más complicado, por supuesto que todo pasa, pero mientras pasa o no creo que también es saludable darse una tregua. Una vez que te has caído en la piscina, puedes dar saltos para respirar, pero llega un momento en que también estás cansado de dar saltos...cansado?, así te sientes?, pues mira lo que te voy a decir, DATE PERMISO!, metete en la piscina y nada en tus sentimientos, bucea en ese agua y "escucha" el silencio, no prestes atención a nada que no sea tu sentirte abatido, impregnate bien, sólo una tarde, no necesitas más...y mañana por la mañana, VUELVE A SALTAR, ya verás como el salto es mucho más alto, tanto, que serás capaz de salir de la piscina y no tendrás que esforzarte más.
No hay nada más contraproducente que negar contínuamente tus sentimientos negativos, son parte de tí, al igual que los positivos, por eso, acéptalos, no por mucho tiempo, eh! no te vayas a hacer amigo de ellos, es sólo darte un respiro para descansar de tanta huida."

miércoles, 5 de agosto de 2015

LOS MIEDOS EN LA PRIMERA INFANCIA

El niño pequeño aparentemente no tiene miedo a nada y va adquiriendo miedos por influencia de la educación, lo que oye a sus padres y a otros niños y por su propia imaginación. Empieza a ser preocupante cuando es obsesivo y da lugar a un estado de angustia en el niño o cuando le altera el sueño y se producen trastornos.
Independientemente de lo anterior, los niños excesivamente protegidos suelen ser más miedosos , ya que tienen padres que les van señalando posibles catástrofes inimaginables que hacen que los niños vean el mundo como un sitio horrible e inseguro.
A lo largo de la evolución del menor, atraviesan tres estadios:
-          Los miedos desde la propia persona, hambre, malestar, dolor, no son miedos propiamente dichos sino malestar.
-          Miedos ante objetos, animales%u2026
-          Miedos hacia personas desconocidas
-          Miedo al ridículo
-          En torno a los 2-5 años, no diferencian lo real de lo imaginario, por lo que empiezan a temer la oscuridad, ruidos fuertes, animales%u2026
Podemos ayudar a los niños a superar sus miedos a través de nuestra actitud. Tenemos que tener muy claro que los niños no pueden ver cualquier cosa en la televisión, y si han visto alguna escena demasiado violenta, debemos desdramatizarla, dándoles explicaciones a su nivel.
El miedo a la oscuridad se debe afrontar a través de un método progresivo.
Por último, si vemos que nuestro hijo tiene un miedo excesivo, debemos acudir a un especialista, ya que puede deberse a una fobia, y como tal, habría que tratarla.
Pero lo que sí me gustaría que tuvierais cuidado, por favor, es lo que ven los niños en la televisión. No hay filtros, no avisan y se ven imágenes muy duras y a partir de ahí los niños lo pueden llegar a pasar mal porque no las entienden. Recordad, la prioridad es cuidar a nuestros niños, no saber qué ocurre en el mundo.